Como dice el refrán popular: "No hay dos sin tres" y después de correr la I Media Maratón Ciudad de León y la IV Media Maratón del Dulce en Benavides del Órbigo, había que correr la II Media Maratón nocturna de Ponferrada, y así fue.
Ayer partimos a las 19h (como era nocturna, la carrera empezaba a las 22h) después de merendar (yo no merendaba desde ni me acuerdo...), pero desde la hora de la comida se hacía obligatorio para tener reservas allá a las 23:45h que preveía acabar de correr.
Las primeras dudas antes de ir, eran ver si tendríamos "gasolina" y el comportamiento del cuerpo en una carrera nocturna larga.
El ambiente como siempre, te encuentras a los "habituales" que no vas a ver hasta la siguiente carrera y la primera sorpresa nos dice Javi Vega al llegar "que no hay chip" (se utiliza atado a la zapatilla para medir los tiempos), que grapado al dorsal va como un alambre circular (me recordaba a las primeras memorias de los ordenadores).
Las sensaciones durante la carrera fueron variadas, es muy diferente a correr de día, en unos kilómetros muy bien, en otros no tanto con punto incluido. Como en otras carreras no fui con ningún grupo (no porque sea individualista o antisocial) sino porque no tenían mi ritmo, la ventaja es que como se disputaba la carrera de 10Km a la vez, pues ibas continuamente pasando gente (alguno también te pasaba).