Comenzadas las vacaciones sigo despertandome a la hora de siempre, pero sin prisas (hay que adaptar el reloj interno). Al cabo de una hora o así oigo una avioneta, no le doy importancia. Pero la sigo oyendo una y otra vez (yo sigo con mis deportes no olímpicos). Cuando acabo una especialidad deportiva que da mucho calor (no doy más pistas), paso a los deportes olímpicos (salgo a rodar un poco) , miro para el cielo y ahí está: "EL TONTO DE LA AVIONETA" dando vueltas y metiendo ruido, con lo grande que es el mundo tiene que sobrevolarnos a nosotros, yo pensé que había restricciones en el espacio aéreo de las ciudades, aunque León no sea Nueva York.
Bueno, al final o se le acabó el combustible o por las horas que llevaba sobrevolándonos le tocaba descansar. Desapareció del cielo azul. Espero no volver a verle ni a oirle.
Confío en que no sea el mismo del post del año pasado, o de este otro. Ya lo dice el refrán: Dios los cria y ellos se juntan...
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1 comentario:
No ha habido suerte y hoy cuando marchaba hacia Benavente a las 09_30h apareció el "tonto" surcando los cielos de León, cuando volví gracias a Dios, ya no estaba. Esperemos que no lo coja como constumbre todos los fines de semana.
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