miércoles, 25 de junio de 2008

Lo hacemos de 2 veces y mal

He tenido que acudir a mi ambulatorio (a por recetas), a ver cuando implantan la receta electrónica, pero desde casa del paciente. Pero no van por ahi los tiros. El tema es que es un ambulatorio nuevo (no tendrá 4 años) que está situado frente a una rotonda, aislado de otros edificios y resulta que no tiene instalación de Aire Acondicionado. Esto no es Córdoba, pero le da el sol desde que sale hasta que se pone y en los mese de calor (que no han de coincidir con los de verano) no hay quien pare dentro.
Desde fuera parece un edificio funcional, pero una vez dentro te fijas en que algo ha fallado. El tejado es de chapa (ya los romanos descubrieron las propiedades del barro y de la teja), con lo cual empieza a calentarse con los primeros rayos de sol. Una vez dentro se observan las ventanas con doble acristalamiento y entre los dos cristales una cortina veneciana. Casi todas las ventanas tienen roto el mando de mover de girar dichas cortinas.
La solución adoptada para remediar el calor consiste en abrir una serie de ventanas (me imagino que a sorteo) para que se cree una corriente de aire. El problema es que abren tanto las orientadas al norte (al fresquito, por dar la sombra) como las orientadas al sur (entra aire caliente), ya sin contar las incomodidades propias de las corrientes de aire, por ejemplo para los alérgicos. Si uno no está malo a lo mejor se pone malo del calor.

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